lunes, octubre 19, 2009

Hacerse rico con los bienes raíces no es tan fácil (I)



Como mucha gente en estos días, a Marjorie Stark no le importaría hacer un poco de dinero extra, o incluso bastante más. Así que cuando asistió el año pasado a una sesión informativa del seminario “Creating Wealth Through Real Estate” (Cómo crear riqueza a través de los bienes raíces) de Robert Allen en Nueva York, estaba más que dispuesta a pagar US$2.495 para asistir al curso intensivo de tres días en estrategias de inversión en bienes raíces.


Preocupada por no tener suficientes fondos para su jubilación y deseando dejar algo a sus hijos, esta profesora de 62 años de Nueva York me dijo: “Estoy convencida de que los bienes raíces son el futuro”.

Yo también fui esa noche y apenas pude resistir la maravillosa idea de que esos tres días me traerían riqueza. Tal como indicó la persona que moderaba la sesión: “Tenemos la misión de crear 1.000 millonarios en 12 meses”.

Un año después, Stark no está ni remotamente cerca de ser millonaria. No ha comprado ninguna propiedad nueva ni ha hecho dinero en bienes raíces (salvo por una propiedad que alquila y que ya tenía antes del seminario la cual compró de la manera difícil con efectivo y préstamos bancarios). Incluso admitió que cuando vio el nuevo negocio de Robert Allen dirigido a la venta de vitaminas pensó que se iba a indigestar. “Quedé muy desilusionada”.

Pero Stark está animada y piensa que hay fortunas que hacer en el sector de bienes raíces. Se acaba de inscribir en otro seminario en un centro de estudios local sobre cómo adquirir propiedades incautadas y en juicio hipotecario. “No estoy segura de que pueda hacerlo con un empleo a tiempo completo, pero estoy ansiosa de comenzar”.

Los bienes raíces tienen algo que atrae
Stark no está sola. La Asociación Nacional de Corredores de Bienes Raíces no lleva un control de los seminarios independientes de inversión en bienes raíces o de la cantidad de personas que asisten, pero su atractivo parece eterno, al igual que las expectativas de hacerse ricos de quienes se inscriben en ellos.

Las probabilidades de ganar no son altas. Por ejemplo, los “mil nuevos millonarios” de Robert Allen nunca se materializaron en el último año. Allen tienen una institución llamada The Enlightened Millionaire Institute. Su sitio Web, Millionaire Hall of Fame, tiene una lista de sólo 50 millonarios (según el criterio de que han generado ganancias que promedian US$2,6 millones).

Un vocero admite que no todos ellos usaron exclusivamente el método Allen de inversión en bienes raíces. (Y, en una nota de exención de responsabilidad, el sitio indica: “Ninguna información ha sido verificada o comprobada. Los resultados varían. Todos los casos de éxito están sujetos al conocimiento y esfuerzo de cada persona”).