lunes, febrero 22, 2010

Por qué todos detestamos perder


Imagínese que le proponen una apuesta al tiro de una moneda en la que, si yerra en la elección, pierde $100. Para decidirse a participar, ¿cuál sería la mínima ganancia que usted desearía?

Las respuestas en general se ubican entre los $ 200 y los $ 250, lo que implica un ratio alto de ganancias sobre las pérdidas.

Es decir que existe una asimetría entre lo que la gente está dispuesta a ganar y a perder de aproximadamente 2,5 veces.

Por lo tanto, se puede inferir que:

A LA GENTE LE DUELE 2,5 VECES MÁS PERDER $ 100 DE LO QUE LA SATISFACE GANAR $ 100.

Por consiguiente, es imprescindible desactivar internamente este mecanismo de obstinación para no ser víctimas de nuestra propia torpeza. Sufrir una pequeña pérdida a tiempo, aunque parezca dolorosa, suele evitar un colapso mayor.

Marcelo Elbaum ('Hombre Rico, Hombre Pobre')